En la anterior publicación propusimos una visión introductoria de la Matriz, y nos preguntamos por qué, para qué y desde qué "opción personal" nos movemos en ella. Esta primera y sencilla propuesta tenía como objeto, comenzar a hacer "resonar" en ti ecos internos, recuerdos y añoranzas de una realidad quizás olvidada, ahogada entre el bullicio de la cotidianidad y la prisión ilusoria del tiempo que nuestra mente proyecta, entre el ayer y el mañana, entre la vacuidad del pasado y el sueño del futuro.
Ahora nos toca completar y profundizar en esta exploración de la Matriz, con el propósito de comprender mejor nuestro papel en ella. Buscamos responder a las preguntas:
¿De Dónde vengo? ¿Cuáles son mis orígenes?
¿Tiene algún significado mi corta y limitada existencia humana, en la gran maquinaria existencial del Universo? ¿Cuál es mi Papel en la trama evolutiva de la Vida?
¿Para qué se me entregó este vehículo orgánico en el que me muevo, esta estructura psicológica de pensamiento y emoción, con estos impulsos internos que siento hacia lo trascendente?
Preguntas y más preguntas. Complejas para la mente, pero… sencillas de responder desde lo Esencial y Real, desde dentro.
Te proponemos algunas pistas para responder estas preguntas, desde dos ángulos diferentes y a la vez curiosamente complementarios. Por un lado, en esta entrada del blog, lo haremos desde el punto de vista de la Tradición Hermética Iniciática. Del otro, en la siguiente publicación, nos introduciremos en el mundo de la Mecánica Cuántica y la Física de partículas, ciencias que coinciden con nuestro propósito en el hecho de que llevan más de un siglo explorando la Matriz Cósmica y Atómica, buscando la interconexión ente lo Macro y lo Microcósmico.
Plantearnos, de la forma más sencilla posible, una visión más amplia, integral y reveladora de la Matriz a la luz de la "Tradición", nos conduce a los conceptos de Creación y de Cosmos. A la cuestión de cómo se creó y diseñó la Matriz. Para ello emprenderemos un viaje hacia el Principio, un viaje hacia nuestro Origen.
La Creación
¿Existe algún "Diseño", esquema o imagen que nos ayude a comprender, más allá de las palabras y los significados, qué es la Creación, cómo emanó y se manifestó? Si hubiera que elegir uno de esos "diseños", entre todos los propuestos por las diferentes Tradiciones del planeta, sin duda sería éste:
Se llama el Arbol de la Vida o Arbol Sephirótico y fue transmitido por la Kabalah Hebrea hace cientos de años. En él podemos ver Esferas suspendidas en una especial disposición, con líneas o senderos que las conectan, describiendo el proceso de la Creación y el Orden Cósmico. Partiendo de este diseño, que originó la Cosmogonía compartida Judeo-Cristiana-Islámica, el relato del Génesis Bíblico narra:
"BERESHÍT BARÁ ELOHÍM ET HASHAMÁIM VEÉT HAÁRETZ"
Al principio Elohim (o los Elohim - Dioses en plural) creo (crearon) los cielos y la tierra.
"VEHAÁRETZ HAITÁH TÓHU VABÓHU VEJÓSHEJ ÄL-PENÉI TEHÓM VERÚAJ ELOHÍM MERAJÉFET ÄL-PENÉI HAMÁI"
Y la tierra estaba desordenada y vacía, y la tinieblas estaban sobre la faz del abismo, y el espíritu de los Elohim se movía sobre la faz de las aguas.
"VAYÓMER ELOHÍM IEHÍ OR VAIHÍ OR"
Y dijeron los Elohim: Sea la Luz, y la Luz fue.
...
"VAYÓMER ELOHÍM NAÄSÉH ADÁM BETZALMÉNU KIDMUTÉNU VEIRDÚ BIDGÁT HAYÁM UBEÖF… "
Entonces dijeron los Elohim: Hagamos al hombre a nuestra imagen, conforme a nuestra semejanza…
"VAYBRÁ ELOHÍM ET-HÁADAM BETZALMÓ BETZÉLEM ELOHÍM BARÁ OTÓ ZZAJÁR UNEKEBÁH BARÁ OTÁM"
Y crearon los Elohim al hombre a su imagen, a imagen de los Elohim lo crearon; varón y hembra lo crearon.
No es nuestra intención interpretar, teorizar ni definir nada. Cada uno debe leer estas palabras desde el estado de "Novedad", y llegar a sus propias conclusiones. Sólo vamos a señalar un detalle esclarecedor: Elohim o los Elohim "Verbalizan, Dicen, La Creación".
Más tarde Juan, el evangelista del Aguila, nos dice en su Discurso del Logos:
“En el principio era el Verbo, y el Verbo estaba con Dios, el Verbo era Dios. Por él todas las cosas fueron hechas.”
Con estos antecedentes que nos aporta la Tradición, podemos llegar a dos conclusiones. La 1ª es que Todo, incluidos nosotros, ha emanado de la Voluntad de un Logos, Mente o Consciencia de orden superior e incognoscible. La 2ª es que ese Gran Arquitecto del Cosmos, CREA mediante el Verbo. Geometriza por el Sonido Primordial, que permanentemente sigue sonando en todo el Universo. Es el OM o AUM del Brahmanismo hindú.
El escritor y mitólogo J.R.R. Tolkien, narra este proceso de la Creación mediante el Verbo-Sonido, en su obra “El Silmarillion”, proponiéndonos una bella e ilustrativa alegoría:
"En el principio estaba Eru, el Único, llamado Ilúvatar; hizo primero a los Ainur, los Sagrados, que eran vástagos de su pensamiento, y estuvieron con él antes que se hiciera alguna otra cosa. Y les habló y les propuso temas de Música; y Cantaron ante él y él se sintió complacido. Pero por mucho tiempo cada uno de ellos cantó solo, o junto con unos pocos, mientras el resto escuchaba; porque cada uno sólo entendía aquella parte de la Mente de Ilúvatar de la que provenía él mismo, y eran muy lentos en comprender el canto de sus hermanos. Pero cada vez que escuchaban, alcanzaban una comprensión más profunda, y crecían en Unisonancia y Armonía.
Y sucedió que Ilúvatar convocó a todos los Ainur, y les comunicó un tema poderoso, descubriendo para ellos cosas todavía más grandes y más maravillosas que las reveladas hasta entonces; y la gloria del principio y el esplendor del final asombraron a los Ainur, de modo que se inclinaron ante Ilúvatar y guardaron silencio.
Entonces les dijo: —Del tema que os he comunicado, quiero ahora que hagáis, juntos y en armonía, una Gran Música. Y como os he inflamado con la Llama Imperecedera, mostraréis vuestros poderes en el adorno de este tema, cada cual con sus propios pensamientos y recursos, si así le place. Pero yo me sentaré y escucharé, y será de mi agradó que por medio de vosotros una gran belleza despierte en canción.
Entonces las voces de los Ainur, como de arpas y laúdes, pífanos y trompetas, violas y órganos, y como de coros incontables que cantan con palabras, empezaron a convertir el tema de Ilúvatar en una gran música; y un sonido se elevó de innumerables melodías alternadas, entretejidas en una Armonía que iba más allá del oído hasta las profundidades y las alturas, rebosando los espacios de la morada de Ilúvatar; y al fin la música y el eco de la música desbordaron volcándose en el Vacío, y ya no hubo Vacío. Nunca desde entonces hicieron los Ainur una música como ésta, aunque se ha dicho que los coros de los Ainur y los Hijos de Ilúvatar harán ante él una Música todavía más grande, después del fin de los días…
Entonces Ilúvatar habló, y dijo: - Poderosos son los Ainur… os mostraré las cosas que habéis cantado y así veréis qué habéis hecho… Y se alejó de las hermosas regiones que había hecho para los Ainur; y los Ainur lo siguieron. Pero cuando llegaron al Vacío, Ilúvatar les dijo: —¡Contemplad vuestra Música!—. y les mostró una escena, dándoles vista donde antes sólo había oído; y los Ainur vieron un nuevo Mundo hecho visible para ellos, y era un globo en el Vacío, y en él se sostenía, aunque no pertenecía al Vacío. y mientras lo miraban y se admiraban, este mundo empezó a desplegar su historia y les pareció que vivía y crecía. Y cuando los Ainur hubieron mirado un rato en silencio, volvió a hablar Ilúvatar: —iContemplad vuestra Música! Este es vuestro canto y cada uno de vosotros encontrará en él, entre lo que os he propuesto, todas las cosas que en apariencia habéis inventado o añadido."
Este poder del Verbo, Logos, Palabra, que los Pitagóricos llamaban el Sonido de la Armonía de las Esferas o la Sinfonía Cósmica Creadora, es de especial importancia para nuestros fines, pues nuestra “resonancia interior” con esta Vibración Original y Universal, nos aportará elementos fundamentales para nuestro despertar interno, así como para el desarrollo de los Juegos Conscientes que aquí iremos proponiendo. Como hemos dicho, la Sinfonía de la Creación sigue sonando desde el mismo Big-Bang, resuena en la Matriz, a nuestro alrededor, por todas partes, en todo momento y lugar.
¿La has escuchado alguna vez?
Resonancia, como veremos, será una palabra que usaremos con frecuencia. Ella nos invita a descubrir el funcionamiento de nuestro sistema Neuro-Emocional, como si de un perfecto instrumento musical se tratara, por el Principio Hermético de “Vibración”.
El Cosmos
La idea de octavas musicales y escalas de vibración, nos lleva al otro concepto, el de Cosmos, cuyo ancestral significado era el de “orden de mundos”, frente a la idea de Caos "desorden". Por tanto, el Cosmos es el conjunto de todo lo Creado, y la Matriz de nuestra vida, que hemos definido como Matriz Existencial Humana, se desenvuelve en ese "Cosmos". Pero ¿Que relación existe entre ellos, entre nuestra Matriz y el Cosmos?
Para responder, hemos de recurrir a una imagen simbólica del diseño y estructura Cósmica. Es el de una Matrioska (¡vaya! que palabra tan parecida a Matriz), esas muñecas rusas que todos hemos visto alguna vez, huecas en su interior, de tal manera que dentro guardan una nueva muñeca idéntica pero más pequeña, y ésta a su vez otra, y otra, y otra …
A través de esta metáfora, la Tradición nos muestra que no existe una única Matriz, transmitiéndonos un esquema del Cosmos formado por varias matrices superpuestas, a imagen de una matrioska.
Así, en un primer nivel, nuestro viaje en el Macrocosmos nos lleva al misterio de los misterios, a la Matriz Primordial Original, anterior a cualquier manifestación o emanación, anterior al Big Bang. Realmente es una no-matriz, sin forma ni medida, infinita, precursora de Todo.
Inscrita en su interior y una octava más abajo llegamos al Universo Creado, surgido del Big Bang, la Matriz Cósmica, formada por la totalidad de conglomerados y agrupaciones de Galaxias.
Rodeada por ésta encontramos a la Matriz Galáctica (o Matrices Galácticas pues cada Galaxia es una Matriz), la Vía Láctea. La Tradición nos enseña que nuestra naturaleza Esencial, se encuentra íntimamente vinculada con esta Matriz Galáctica, con cuya sinfonía vibra y resuena.
Una octava inferior más y llegamos a la Matriz Estelar, en nuestro caso el Sistema Solar, formado por la armonía de las órbitas planetarias alrededor de nuestro Sol.
Inscrita en ésta se encuentra la Matriz Planetaria, o como la llamaban los antiguos "Gaia", nuestra madre Tierra. En su interior se desarrolla nuestra Matriz Existencial Humana, nuestra vida.
Ésta, a su vez, circunscribe a una matriz menor, la Matriz Celular, que forman cada una de las células de la estructura de nuestro organismo. Y finalmente, una octava más en la escala y encontramos a la Matriz Atómica, formada por cada átomo de nuestra materia.
La Tradición además nos enseña dos cosas más sobre esta Matriz Primordial y las otras 7 emanadas de ella:
1) Cada Matriz tiene "Un Núcleo o Fuente" que la nutre y a través del cual se irradian todos los elementos necesarios para su manifestación y desarrollo. Conocer la Fuente de una Matriz, nos da la posibilidad de sintonizar con su centro y alinearnos con su vibración, pues los núcleos de cada Matriz se encuentran interconectados.
2) Algunos maestros, como Gurdjieff en su esquema del Rayo de la Creación, asignan a cada Matriz un número simbólico, que corresponde a las leyes fundamentales que la rigen, así como a su nivel vibratorio en las octavas de la Sinfonía de las Esferas.
Así, la escala vibracional cósmica queda de la siguiente forma:
- Matriz Primordial: Núcleo o Fuente en la Luz de la Llama Original del Logos. Nutre y alimenta a todos los demás núcleos y fuentes matriciales. Se le asigna el 1, el primer nivel vibratorio y una única Ley.
- Matriz Cósmica: Núcleo en el Centro Radiante del Big-Bang, la Fuente de Emanación. 3 es su nivel vibratorio y el número de leyes que la rigen.
- Matriz Galáctica: Núcleo en el Sol Central de la Galaxía. 6 son sus leyes.
- Matriz Estelar: Núcleo o Fuente en el Sol, la Consciencia Logoica que nutre nuestro Sistema Solar. Es una matriz de 12 leyes.
- Matriz Planetaria: Núcleo en el centro del Círculo Consciente de la Humanidad Solar, que algunos llaman "Shambala". Vibra con 24 leyes.
- Matriz Existencial Humana: Núcleo en nuestro centro del Corazón, en el Átomo Nous. 48 son sus leyes y nivel vibratorio.
- Matriz Celular: Fuente en el núcleo de la célula, donde se encadena la doble hélice de la vida. Matriz de 96 leyes.
- Matriz Atómica: Su núcleo es el del átomo, donde la danza de las partículas encuentra el misterio de materia, energía y consciencia. Se le asigna el número 192 en leyes y escala vibracional.
Todo esto... ¿de qué nos sirve en nuestra vida práctica? ¿Se trata de más alimento para el intelecto?
Lo expuesto es información, sólo eso. Ahora comienza el trabajo Real para ti. La reflexión en estas ideas, imágenes y diseños, al objeto de que se consoliden aquellos elementos que puedan resultar útiles para tu despertar. Cada uno de acuerdo a su nivel. Pero aún vamos más allá en nuestro propósito.
Además, el sentido de compartir estos fragmentos de la Tradición, no es otro que llevarnos a "establecer y fijar" en nuestro interior, la convicción y el recuerdo de que nuestro Ser Real, al que llamamos "Yo Soy", ES lo que el Creador ES. Participa de su misma Naturaleza Esencial Creadora y por tanto Cósmica, pues conforme a la Tradición: "Fue creado a su Imagen y Semejanza, a Imagen de Dios lo creó".
En consecuencia:
¿Hay límites para tu desarrollo?
¿Hay límites para tu capacidad de Hacer, tu capacidad de modelar tu realidad?
¿Hay límites para actuar en tu Matriz Existencial Humana, transcenderla y participar del Aprendizaje y Acción en esas otras Matrices?
"Puesto que así lo creyó, así fue."
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¿Quieres Jugar?
Ahora ha llegado el momento de proponerte Jugar. Todas las crías animales aprenden las habilidades necesarias para sobrevivir mediante el juego. También los niños humanos aprenden ciertas destrezas, pautas sociales y culturales mediante el juego, desempeñando roles y simulaciones psicológicas y educativas. Pero su fin último es lúdico, de diversión y disfrute, de experimentar la felicidad y la dicha de Vivir.
Por tanto, nuestra propuesta de “Jugar”, se refiere a la capacidad de acción en nuestra vida desde esa otra perspectiva. Es una llamada a la mayor de las motivaciones internas del individuo, su capacidad de ser Feliz, de sentir como fluye en su interior la energía del Entusiasmo y la Alegría Vital en aquello que hacemos.
En una ocasión un discípulo, muy interesado en los estudios intelectuales y la literatura esotérica, preguntó a un Iniciado:
- Maestro, ¿Cuál es el estado perfecto de la Mente?
Los que estábamos allí nos miramos y pensamos ¡Vaya una pregunta! esperando un largo y razonado discurso por respuesta. Sin embargo el iniciado sonrió, le miró y prácticamente sin pensar contestó: "Mente de Niño."
Y ahora podemos preguntarnos ¿Cómo es la mente de un niño?
Es pura espontaneidad, que brota del Ahora, sin prejuicios ni premeditación. Es Asombro y Descubrimiento constante, pura Curiosidad. Es Percepción y sobre todo Alegría Vital. Por eso, en nuestros juegos, hemos de regresar y recuperar el espíritu de la infancia perdida. Por eso dijo el Maestro de maestros: "Hasta que no seáis como niños, no entraréis en el Reino de los Cielos."
Hasta ahora, sin percatarnos de ello, hemos jugado el “Juego del Ego”, el “Juego de la Ilusión”, de los roles y personajes del yo que interpretamos desde que nos levantamos cada mañana. Y la verdad, se nos da muy bien este juego del Sueño Colectivo. Ahora, nuestra invitación es al Juego Consciente, que también nos permitirá desarrollar ciertas habilidades y destrezas, pero en este caso tendentes al florecer y desarrollo de nuestra Consciencia. Se trata de Juegos para el Despertar. Como en todo Juego las condiciones son divertirnos, aprender y compartir la experiencia con tus compañeros de juego. Aquí también asumiremos un rol. Será el rol del Ser. Pero en lugar de interpretar, dejaremos que el actor real surja y fluya desde nuestro interior. Que actúe en y a través de nosotros.
Para ello necesitaremos Magia, y como en el juego todo es posible, pues seremos Magos. Como niños creeremos ser auténticos magos en nuestros juegos, por el poder de la Imaginación. Pero ese no será el único poder de nuestra Magia, aparecerán otros que romperán los límites de “lo posible e imposible”, de lo que llamamos realidad. Por ahora, el escenario de nuestros juegos será ese rincón de nuestra Matriz que llamaremos "el patio de juegos". Por tanto jugaremos en nuestra propia vida, jugaremos nuestra vida. Poco a poco extenderemos el juego más allá, y permitiremos que el actor real tome el control, pero en su momento y en su lugar. Mientras tanto, en la vida exterior que llaman el mundo real, siempre hemos de mantener los pies en el suelo.
El Juego de la Presencia
Esta es la primera propuesta de juego. Lo llamaremos el juego esencial, ya que sin él los demás no funcionarán ni conseguiremos sus objetivos. Jugando a él desarrollaremos uno de los poderes de los que hablábamos antes. Es el Poder de la Presencia en el Ahora, que nos permitirá nada menos que trascender y romper la prisión del tiempo.
El tiempo es percibido por nuestra mente como una sucesión de momentos, pero debido a su estado de identificación y fascinación con la realidad ilusioria, la mente se proyecta en el pasado y el futuro como si fueran reales, cuando son pura ilusión, sólo existen en su sueño de tiempo psicológico. Esta fascinación temporal es fruto de nuestra percepción de los ritmos y ciclos de nuestro entorno, día y noche, verano e invierno, los ciclos biológicos de nuestro cuerpo. Pero se ha convertido en una capacidad de nuestra mente, casi patológica, para evadirse de la realidad y vivir proyectada entre el ayer y el mañana, éste es el problema. No es que no exista el pasado, una historia de acontecimientos, pero allí fueron momentos presentes, ahora interpretados y catalogados por el Ego, en unos casos doliéndose de sus frustraciones e insatisfacciones, en otros refugiándose en los momentos felices que fueron, muchas veces impidiéndonos ver aquellas oportunidades de ser felices Ahora. Respecto al futuro, no existe como tal, cuando lleguemos a él, ya no será futuro, será Ahora. El momento presente del que constantemente queremos escapar en el Juego del Ego. Pero soñamos constantemente en el mañana, imaginándonos víctimas por el miedo a enfermar, a sufrir calamidades y desastres, o líderes victoriosos, o multimillonarios acaudalados con el mundo a sus pies, o proyectando el sufrimiento de los enemigos y el perpetuo halago de los amigos. Todo esta actividad, más común y continua de lo que pensamos, es malgastar torpemente el valioso potencial y energía de nuestra mente.
Con este juego, no sólo conseguiremos controlar el tiempo, además y más importante, permitirá que el Actor Real, el auténtico Mago, comience a fluir y expresarse en nosotros a través de la PRESENCIA.
¿Cómo se juega?
Muy fácil, se trata de ATRAPAR EL MOMENTO, sencillamente eso.
Pero claro, siempre en todo juego hay un obstáculo o dificultad que superar, si no resulta algo aburrido, y en este caso la dificultad es, que el Ego, nuestro yo con su constante pensamiento automático, mecánico y descontrolado, nos deje jugar, por lo menos durante cierto tiempo. Como vas a comprobar, ese continuo parloteo mental inconsciente hace que el Momento Presente, sea algo muy evasivo y esquivo. Ahora, recuerda mantenerte en estado expectante, ante la Novedad de lo que puedas descubrir en el juego, y sobre todo ¡Diviértete!
Para jugar estableceremos dos patios de juego diferentes en nuestra Matriz.
El primero será un lugar de tu elección, en soledad y tranquilidad, donde sencillamente te sientes, y juegues con el poder de la ATENCION, que también es una de tus habilidades, pero ésta proviene de una fuente más allá de la mente cotidiana.
Comienza el primer paso del juego, cerrando los ojos y poniendo toda tu atención en un punto de tu cuerpo, tu Corazón latiente. Percíbelo… siéntelo. Si aparece alguna distracción en forma de pensamiento, no te dejes atrapar por ella, que pase, tu mantén la atención en este momento presente, aquí y ahora.
Continúa extendiendo tu Atención a todo tu pecho. Siente tu respiración y céntrate en ella, en su flujo, en como el aire entra y sale rítmica y tranquilamente. Mientras hay percepción, no hay proyección mental. Tu meta en el juego es percibir el MOMENTO presente, y establecerte en él.
Seguidamente extiende tu Atención más allá, a una percepción de todo tu cuerpo. Escúchalo, siéntelo internamente como totalidad. Si nos damos cuenta de que algún pensamiento o estimulo externo, nos saca de este estado de Presencia, simplemente vuelve a él, no estas haciendo nada mal. Recupera tu Presencia y céntrate en el Ahora. En alerta Percepción. En permanente Novedad. No juzgues nada. No analices nada. Sólo PERCIBE.
Ahora, en el segundo paso, abre los ojos. Observa tu alrededor. Los objetos de la habitación en que te encuentras, los sonidos, los olores. No te pierdas nada, y sobre todo, no pierdas la atención. No permitas que tu mente te diga ¡Esto lo has visto ya cientos de veces! Tu sencillamente, vuelve a la atención, pues puede ser que sea la primera vez que estés viendo esos objetos realmente, desde la novedad, desde el estado de Presencia.
Finalmente, en el tercer paso del juego, sin necesidad de cerrar tus ojos, céntrate en los objetos, pero ahora en los que vienen desde tu interior. Observa los pensamientos que puedan surgir, tus emociones, tus reacciones. De nuevo, si pierdes la atención, el momento, vuelve a él y observa desde la Presencia. Insistimos, no analices, no juzgues. Esos pensamientos que se piensan en tu mente, esas emociones y reacciones que sientes en ti, también son objetos, formas psicológicas, sin realidad substancial, que puedes observar y contemplar. Entonces, como dice el maestro del Ahora, Eckhart Tolle: "Comenzarás a sentir en tu interior algo más poderoso que cualquiera de las cosas y objetos observados, la Presencia misma, serena y observante, detrás de tus contenidos mentales, es el Observador Silencioso." Ese es el Mago de nuestros juegos.
Una vez te afiances en la Presencia, después de varias sesiones de juego, puedes ya establecer un segundo patio en la Matriz, pero ahora no sentado, ni con los ojos cerrados como en el primer paso anterior, sino que elegirás alguna de tus actividades cotidianas. Mientras caminas por la calle, en el Centro Comercial, mientras conduces. Busca y establece unos pocos minutos para Jugar a la Presencia, ejercita tu Atención en el aquí y ahora. Percibe, observa los objetos fuera y dentro de ti como hemos descrito. Observa tu mente reactiva a lo que la Matriz proyecta desde afuera, situaciones, personas, siempre recuperando el Momento Presente. Esta parte, interactuando con el entorno, suele ser la más divertida.
Pues bien, esta es nuestra primera propuesta. Empieza jugando una vez al día, y poco a poco establece tus patios de juego. Siéntete libre para jugar, hazlo como desees, estas indicaciones son sólo eso, indicaciones. Lo importante es la Presencia, el Momento, el Ahora. Pero ojo, si insistes y juegas durante más tiempo y varias veces al día, el juego puede llegar a ser "divina y agraciadamente" adictivo, y sus efectos iluminarán tus pasos en la Matriz.
Al principio, las primeras veces que juegues, al invocar en ti el poder de la Atención, la mente vendrá corriendo, veloz, a ver qué pasa, qué hay de nuevo. Al momento, cuando vea que sólo hay percepción, observación consciente, que no pasa nada de lo que espera, se aburrirá y te mirará sospechosamente, pensando ¡Este tío o tía se ha vuelto loco! e intentará proyectar pensamientos, las facturas pendientes de pagar, la fiesta a la que irás en unas horas, el compromiso laboral de mañana… para distraerte, para que te evadas de la realidad que quieres descubrir. Ese es su juego. El tuyo es la Presencia.
Dice el maestro Thich N. Hanh, que el mejor regalo que podemos hacer a nuestros seres queridos, es el de la Presencia. Estar plenamente presente cuando estamos con ellos, escuchándolos, sintiéndolos, percibiéndolos desde la Novedad, desde el SER.
¿Te animas a jugar?
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